EL PLAN DE DIOS PARA NUESTRAS FINANZAS

EL PLAN DE DIOS PARA NUESTRAS FINANZAS

de Jose N Briceño A, el Lunes, 07 de febrero de 2011 a las 17:25

MINISTERIO DE LA ENSEÑANZA Y LA EVANGELIZACION “JESÚS SOBERANO SEÑOR” ASOCIACIÓN CIVIL SIN FINES DE LUCRO, CON PERSONERIA JURIDICA, INSCRITO EN EL MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA EL INTERIOR Y JUSTICIA, DIRECCIÓN DE JUSTICIA Y CULTO, BAJO EL # 57-56. Y SU ESCUELA DE FORMACIÓN Y CAPACITACÓIN TEOLÓGICA.

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    SI DIOS NO TUVIERA UN PLAN PARA NUESTRA VIDA FINANCIERA, GRAN PARTE DE NUESTRA VIDA ESTARIA FUERA DE SU VOLUNTAD.

   Toma en cuenta que la única forma en que Dios puede confiar en nosotros sus recursos financieros, y por ende que podamos ser prosperado en esa área, está en proporción directa con el conocimiento que obtengamos de todo aquello que tenga relación con el tema de las finanzas; esto indica, que nuestra prosperidad financiera no depende en su totalidad de Dios, sino también de nosotros.

    Debemos tomar en cuenta que todo, absolutamente todo, es de Dios; nosotros apenas somos administradores de lo que recibimos de Él. Si seguimos las instrucciones que Dios nos ha dejado en el tema de las finanzas, Él nos permitirá administrar todos sus recursos.

     La Biblia nos enseña mucho acerca de cómo tener libertad financiera, la manera de presentar este tema es tan importante, que Dios sólo nos bendecirá en la medida en que conozcamos y apliquemos con fidelidad dicho conocimiento.

Jesús dijo en Juan 8:32: “Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”. Esto indica que un creyente nunca podrá conseguir libertad financiera hasta que conozca la verdad en dicho tema.

Desarrollando temas en contra de la prosperidad, conduciendo a un pueblo a la miseria, desubicándolo del propósito de Dios, produciendo en ellos desajustes financieros que lo degradan socialmente.

Ésta es una verdad que se escapa y no está clara en algunos creyentes ni en la mayoría de nuestras congregaciones. Por muchos años se nos enseñó que era necesario sufrir penalidades y pobrezas, viviendo en la miseria con el fin de agradar a Dios. Es el colmo que en estos tiempos, tengamos Ministros

    Derek Prince dijo: “Si Dios no tuviera un plan para nuestras finanzas, gran parte de nuestra vida estaría fuera de Su voluntad, porque éste siempre ha sido el propósito y el deseo de Dios: Restaurar al hombre integralmente”.

     Un creyente que no conozca el Plan Financiero de Dios para su vida, no podrá caminar con éxito en sus finanzas, ya que desconoce lo que Dios ha propuesto y designado para la Iglesia en el área financiera.

     El tema de las finanzas es netamente Bíblico, con principios espirituales de formación para la vida del creyente. Es una doctrina básica y fundamental para el crecimiento espiritual, ya que dicho tema encierra principios y actitudes netamente espirituales. Por ello, debemos conocer algunos factores que tienen que ver con el Plan Financiero de Dios para la Iglesia.

     Éste es el objetivo del estudio contenido en este libro. Te pido por favor, que no leas este ejemplar como un magazín, sino que hagas de él una herramienta de estudio, analizando los textos que te presentaré, tomando en cuenta los principios que allí se encuentran, apropiándote de ellos, para que puedas enseñar y bendecir a otros.

      El objetivo principal que recibí de Dios en el Ministerio de la Enseñanza es que, a través del conocimiento de su Palabra, pueda sacar al pueblo de la ignorancia en la que vive, y a su vez, darle un balance a la iluminación de las verdades que están reveladas en su Palabra, y que podamos tener un conocimiento preciso, conciso y balanceado.

      Por otro lado, por la falta de conocimiento del tema, algunos han distorsionado los principios Bíblicos para su propio peculio, enriqueciéndose y despojando a los feligreses de sus recursos.

      Esto ha traído como consecuencia un desajuste financiero que ha llegado hasta el punto extremo de que en la mayoría de nuestras congregaciones no tenemos recursos para el establecimiento del Reino.

      El tema de las finanzas es un tabú para la Iglesia, y para muchos Ministros es un tema totalmente delicado y controversial, razones por las cuales no se trata en nuestras asambleas con frecuencia, por temor a perjuicios o prejuicios de parte de los oyentes.

“Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos”

   E-mail: josebriceno77@hotmail.com /www.reformafm.net

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