JERARQUÍA DE LOS DEMONIOS

 

          MINISTERIO INTERNACIONAL DE LA ENSEÑANZA Y LA EVANGELIZACIÓN.

                                       " JESÚS SOBERANO SEÑOR"                                                                                                    DR. MAESTRO: JOSÉ N. BRICEÑO A.

TEMA: EN EL CONOCIMIENTO DE LA FE.

La carencia de la fe en la vida de un hijo de Dios lo descalifica por completo de ser un creyente. Se corre la posibilidad de ser hijos de Dios y no ser creyentes, porque el ser hijo de Dios es una relación que obtuviste en el nuevo nacimiento en la regeneración, pero el ser creyente está en proporción directa con la fe. La vida de fe tiene que ver con nuestra forma de conducirnos persuadidos en las verdades del Reino Eterno.  La fe es vital para la vida de todo aquel que forma parte del cuerpo de Cristo. Solamente por la fe en Dios y en su Palabra, nos podemos sostener ante las circunstancias adversas de la vida.  El Apóstol Pablo denota que la fe debe ser un estilo de vida (una forma de vivir).  El texto sagrado dice, “El justo por la fe (Hebreos 12:1 y Habacuc 2:4) vivirá”. En otras palabras: el creyente permanecerá y se mantendrá firme es a través de la fe. Reitero, la fe debe ser un estilo de vida en creyente, no es algo fortuito, ocasional, en el cual acudo cuando necesito de ella, veinticuatro horas al día debo caminar y vivir en fe, persuadido de las verdades del Reino Eterno.  

     Solamente por la fe, es que se pueden alcanzar las metas que se nos han encomendado como hijos de Dios en la gran comisión que se nos ha confiad. En hebreos 12:1 se nos hace un llamado a emprender una carrera para alcanzar una meta o un objetivo que otros ya alcanzaron por la fe. Los héroes de la fe nombrados en hebreos 11, nos desafían a confiar en Dios en medio de todas las circunstancias. A través de sus ejemplos vemos que la fe no es solo una teoría una hipótesis, sino una forma de vida basada en la confianza que se tiene en el carácter y la fidelidad de Dios.

      Si hacemos un análisis del texto sagrado donde se menciona la vida de fe de cada uno de ellos, quedaríamos impresionado y a la vez retados por las circunstancias adversas y el camino escabroso en la cual tuvieron que enfrentar, los grandes desafíos que tuvieron que afrontar para lograr un objetivo. En el caso de Noé el texto dice:

     Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.

   Según lo que registra el Texto Sagrado antes del diluvio no existía el fenómeno de la lluvia en la tierra en forma torrencial, toda la tierra en general era rociada por un vapor que emanaba de la misma tierra.  la tierra estaba posiblemente rodeada por un firmamento o bóveda de agua, creando un efecto invernadero en el clima de la tierra. La fe de Noé estuvo en el obrar en la construcción de un arca en un periodo aproximado de 100 años, para ser preservado de un diluvio que nunca antes desde su peregrinar en la tierra había existido o se había dado.

     Jehová Dios aún no había hecho llover sobre la tierra, ni había hombre para que labrase la tierra, ⁶ sino que subía de la tierra un vapor, el cual regaba toda la faz de la tierra. Genesis.2:5.6.

     La fe es parte del gran arsenal que Dios le entregó a la iglesia para librar todo conflicto que se presenten en con de las tinieblas, la fe como arma es la de mayor vitalidad, ya que de ella dependen la función de todas las demás; y esto lo podemos entender tomando en cuenta el término “Sobre todo” que aparece en Efesios 6:16, en referencia a la fe, donde se indica gramaticalmente que las otras armas dependen de la fe. Según lo que está registrado en 1ª Juan 5:4, la fe es la fuerza que nos mantiene ante los ataques y las asechanzas de las tinieblas y las circunstancias adversas que se presenta en la vida. La vida de fe en un hijo de Dios no es un cuento de niño, no es una falacia, no es un cuento bien contado; es o debe ser un estilo de vida. La fe es un arma que se nos entregó para entrar en un campo de batalla, de lucha; se nos dio para librar un conflicto que, según los registros del Texto Sagrado, muchos la perdieron por no considerar lo serio del asunto en relación a la fe. Muchos perdieron: Reinos, bienes, su salud, sus finanzas, sus familias, el propósito de Dios, aun hasta la vida; por no atender y entender el llamado tan serio el cual es correr la carrera de la fe hasta lograr el objetivo.  

     Una de las cosas que debemos preguntarnos es ¿cómo se puede vivir en fe si no se tiene un conocimiento preciso, conciso, y detallado del sistema de la fe? La falta de conocimiento es un elemento de cooperación que Satanás utiliza como arma para tratar de destruir a la Iglesia. Reitero: ¿Cómo puede un creyente vivir en fe sino tiene conocimiento de ella?

     Hay un principio que está establecido en la Palabra que dice, que nunca“no podemos aplicar lo que no conocemos, y no podemos conocer lo que no tenemos”. Que no es tener sini conocer, y no es conocer sino aplicamos.  

      Pablo dijo: “En parte conocemos, en parte profetizamos” (1ª Corintios 13:9). La pregunta es ¿por qué profetizamos en parte? Su respuesta es: porque en parte conocemos.

      Jesús dijo: “Lo que sabemos hablamos y lo que vemos testificamos” (Juan 3:11). La pregunta es ¿por qué hablamos y testificamos de lo que sabemos y vemos? Su respuesta es: porque no podemos hablar y testificar de lo que no sabemos y de lo que no hemos visto.

      La falta de conocimiento es un elemento de cooperación que Satanás utiliza como arma para tratar de destruir a la Iglesia.

       Oseas 4:6 dice que un pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento.

       Isaías 5:13 dice que un pueblo fue llevado cautivo porque no tuvo conocimiento.

       Según los pasajes antes mencionados, la ignorancia trae como resultado cautiverio y destrucción. La verdad trae todo lo contrario.

       Jesús dijo: “conoceréis la verdad y la verdad os hará libre”. (Juan 8:32)

       Nota: Donde no hay libertad no está la verdad, donde no está la verdad no hay conocimiento, donde no hay conocimiento no hay visión, donde no hay visión no hay iluminación, donde no hay iluminación no hay revelación, y donde no hay revelación no está la Palabra.

      La palabra trae la revelación, la revelación la iluminación, la iluminación visión, la visión es el conocimiento, el conocimiento es la verdad, y la verdad te hace libre.

      De allí la importancia de conocer la fe en toda su extensión, conocerla desde el punto de vista exegético, polifacético, y sistemático; para poder hacer de ella un estilo de vida. De la única manera que un creyente pueda operar en fe sin conocerla, es que se manifieste el don de fe como auxiliar por el Espíritu en una forma ocasional, circunstancial, y fortuita.  Comencemos e hacer un estudio del tema de fe en todas sus extensiones.