EDUCACION SEXUAL PARTE 2

EDUCACION SEXUAL PARTE 2
LECTURA: 1ª CORINTIOS 7:1-5

COITO ANAL O ANALISMO.

En el concepto Bíblico hay ciertos términos que en una forma tácita pueden estar haciendo alusión al coito anal, a continuación voy a describir dichos términos.

Lascivia: La palabra en el griego es aselgia; denota exceso, libertinaje, alguien que está sin freno (2ª Co 12:21, EF. 4:19, Romano 13:13, 1ª Pedro 4:3, Judas 4).

Malos deseos: La palabra “malo” es kakos del griego que indica la maldad en el carácter, un aspecto sádico de la persona que puede manifestarse en lo sexual (1ª Co: 15:33, Col. 3:5, 1ª Ti 6:10, 1ª P. 2:11; 4:2).

Perverso: La palabra del griego es diastrefo que es un término compuesto “dia = traves, y strefo = dar la vuelta” y hace alusión a lo distorsionado, lo torcido (Mt 17:17, Luc 9:41, Hechos 13:10, Fil 2:15).

Inmundicia: La palabra en el griego es Acatarsia, este término se emplea para el pus de una herida, en 2ª Cor 12:21 aparece relacionado con la fornicación.

Nota: Si analizamos el carácter de estos términos juntamente con Romanos 1:26-27 y Judas 4, se puede estar haciendo mención en una forma sobre entendida del coito anal conocido en el mundo histórico como sodomía.

En cuanto al coito anal analizándolo desde el punto de vista patológico, tiene toda una gama de desventajas para ambos sexos.

Científicamente es algo contra natural. Cuando nos referimos a la contra natural sencillamente estamos diciendo que lo natural responde a lo biológico.

Dios hizo los órganos del cuerpo para funciones específicas y favorables a la naturaleza y hay tres elementos que se deben tomar en cuenta para disfrutar la salud sexual seria.

I) La posibilidad de disfrutar de una actividad sexual reproductiva equilibrando una ética personal y social.

II) El ejercicio de la sexualidad sin temores, vergüenzas, culpa, mitos, ni falacias.

III) El desempeño de la actividad sexual libre de trastornos orgánicos, enfermedades o alteraciones que la entorpezcan.

Nota: Si tomamos en cuenta las consecuencias, que se dan desde el punto de vista moral, social y patológico, el coito anal debe ser considerado bíblicamente como algo desagradable a los ojos de Dios.

A continuación vamos analizar las consecuencias que se dan en el aspecto patológico a los involucrados en dichas relaciones en lo heterosexual y homosexualismo.

a)La ampolla rectal, que se encuentra entre el colón y el esfínter anal tiene ciertas propiedades para: expulsar, evacuar, desechar, de modo que dicho órgano en sus propiedades no está preparado para recibir; de modo, que todo lo que entra por el ano por reflejo este órgano intenta expulsarlo considerándolo un objeto extraño.

b) El esfínter anal tiene una propiedad de hacer su abertura hacia fuera y cerrarse hacia dentro, tratar de introducir algo por el esfínter anal es como querer abrir una puerta en sentido contrario y eso se considera una violación.

c) Hacer estas relaciones da como resultado la relajación del esfínter anal, esto indica, que el esfínter pierde sus propiedades herméticas y la persona no puede contraer o constreñir y por ende tiende a evacuarse sola.

d) Dentro de los desechos fecales hay un virus conocido como Herpes-zoster el cual siendo extraído por el glande en miembro viril e introducido al conducto vaginal es lo que produce el cáncer en el cuello uterino.

Nota: Este virus (herpes zoster) dentro del recto es normal no produce ningún daño.

>Las relaciones coito anal producen hemorroides y a la larga cáncer intestinal.

>En el caso del hombre le produce uretritis y prostatitis.

DEBE HABER UNA PREPARACIÓN ANTICIPADA TANTO FÍSICA COMO VERBAL ANTES DE LLEGAR A LAS RELACIONES SEXUALES (1ª Co 7:5).

No hagamos de nuestras esposas un objeto sexual, muchas veces nuestras esposas se sienten usadas o utilizadas.

No debemos olvidar que somos seres humanos con sentimientos y emociones que deben ser cultivadas.

Hagamos que nuestras esposas se sientan realizadas y entiendan que forman parte vital en la vida de su esposo.

Recuerda que el maltrato físico y verbal es una de las causas que producen el desgano sexual en ambos sexos.

El romanticismo y la galantería deben seguir siendo etapas fundamentales en el matrimonio, como lo fue en el noviazgo. Debemos besar, desear y ser galantes con nuestros cónyuges como lo éramos en el noviazgo, nada debe cambiar. Una muestra de ternura significa ser conciente y sensible ante la existencia de la pareja, desarrollar la capacidad de adelantarse y reaccionar a sus emociones. La ternura debe constituir un elemento constante de afecto dentro de un matrimonio. Su relación con la cohabitación sexual ha de ser cuestión de preferencia personal.

Una muestra de tierno afecto resulta invariablemente un preludio aceptable para la cohabitación sexual, una pareja no debe temer acariciarse y besarse antes de retirarse por la noche. Cada uno de los cónyuges puede infundir así en la mente del otro la expectativa de la cohabitación sexual, excitándole lentamente hasta que llegue alcanzar un alto grado de erotismo. Un abrazo tierno que conduzca gradualmente a una mutua exploración erótica dispone el acto de la cohabitación sexual en un contexto romántico al tiempo que relaja y prepara al cuerpo para una más concreta sexualidad.

NO DEBE HABER LUGAR PARA EL EGOÍSMO: AMBOS DEBEN SATISFACER MUTUAMENTE.

Para lograr esto debemos conocer ciertas verdades.

a) Debe haber sumo control de ambas partes, no te desesperes.

Debemos conocer que la relación sexual es una mutua entrega, no es un asalto. Por eso se debe tener el lugar y tiempo adecuado para una buena relación sexual, debemos entender y tener como primer objetivo satisfacer a nuestro cónyuge y no pensar en nosotros mismos como algo aislado.

b) Debemos, por todos los medios adecuados, contribuir a que nuestro cónyuge alcance el clímax para luego llegar al orgasmo.

Clímax. Es la progresividad ascendente de la excitación sexual.

¿Cómo lograr que nuestro cónyuge alcance el clímax?

Para lograr el clímax de tu cónyuge debes trabajar a través de las caricias en las zonas erógenas, se deben hacer ciertas exploraciones en dichas zonas.

¿Qué son las zonas erógenas?

La palabra erógena es un término compuesto del griego (eros = amor y gennao = producir, hacer crecer).

Las zonas erógenas son las que mediante estímulos externos, especialmente el contacto físico con la pareja aplicada en su superficie cutánea o mucosa, producen sensaciones eróticas.

A continuación vamos a dar una lista de las zonas erógenas masculinas y femeninas.

Zonas erógenas femeninas.

Boca (labios, lengua), oreja, nuca, cuello, zona axilar, senos, pezones, manos, cintura, muslos, ombligo, glúteos, monte de venus, labios mayores, labios menores, conducto vaginal, clítoris, incluyendo el punto “G”.

Zonas erógenas masculinas.

Boca (labios, lengua), oreja, nuca, cuello, tetillas, cintura, muslos, pene, escroto (la túnica que cubre los testículos).

Las zonas erógenas se dividen en dos:

Zonas erógenas primarias.

Son las que, tanto en el hombre como en la mujer, al ser excitadas pueden conducir al orgasmo o sensaciones máximas de placer sexual.

Zonas erógenas secundarias.

Por lo contrario, con excepción de los pechos, estas zonas no son capaces de conducir directamente al orgasmo aunque si la facilita, ya que tienen la posibilidad de actuar como el inicio o provocador del arranque del estímulo sexual corporal directo, y de influir físicamente, mediante el desencadenamiento de una serie de reflejos, sobre las zonas erógenas primarias.

Nota: No se debe explorar o acariciar las zonas erógenas primarias si no se ha trabajado con las secundarias.

CLASIFICACIÓN DE LAS ZONAS ERÓGENAS PRIMARIAS Y SECUNDARIAS TANTO FEMENINAS COMO MASCULINAS.

Zonas erógenas primarias femeninas.

Monte de venus, labios mayores y menores de la vulva, conducto vaginal, clítoris, punto “G”.

Zonas erógenas secundarias femeninas.

Boca (labios, lengua), oreja, nuca, cuello, zona axilar, senos, manos, cintura, muslos, ombligo, glúteos.


Nota: Aunque todas las mujeres son clitoridianas hay unas que lo son el 100% en su totalidad, es decir, hasta que no se les acaricie el clítoris difícilmente alcanzarán un orgasmo.

Zonas erógenas primarias masculinas.

Pene, en todas sus extensiones, principalmente el glande, el escroto (túnica que cubre los testículos).

Zonas erógenas secundarias masculinas.

Boca (labio, lengua), oreja, nuca, cuello, tetilla, cintura, muslos.


Nota: Una vez que se haya trabajado en una forma recíproca en las zonas erógenas viene como resultado el clímax, y como producto de la fusión, es decir, de la unión de los genitales, se alcanza el orgasmo simultáneo.

Observación: Debemos tomar en cuenta que hay el tipo de mujer que sufren de “anorgasmia” que es la imposibilidad de lograr el orgasmo.


LA PENETRACIÓN Y EL TIEMPO ADECUADO.

El hombre debe conocer el momento y la forma de la penetración del miembro viril en el conducto vaginal.

En cuanto al tiempo de la penetración.

Después de explorar las zonas erógenas, en la mujer hay ciertos indicativos que nos muestran el momento adecuado para la penetración.

a) Lubricación en aumento en la vagina.

b) Aumento del clítoris y labios menores.

c) Erección de los pezones.

d) Cambio de temperatura.

e) Palpitaciones cardíacas aceleradas.

f) Gestos y palabras.

Nota: En cuanto a gestos y palabras la mujer debe comunicar el momento de la penetración. Hay una forma muy sutil de poder anunciar el momento, es cuando la mujer toma el miembro viril con sus manos y lo conduce al conducto vaginal.


Forma de penetración.

>La penetración no debe ser brusca con movimientos acelerados.

>La penetración debe ser suave con movimientos pausados, que se van acelerando en el momento de cada penetración.

>Una penetración brusca o fuera del tiempo trae como resultado una descendencia del clímax y de esta forma impide el alcance del orgasmo.


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